ORACIÓN POR MÉXICO
Por Jorge Fernández H.
Amado Dios, me dirijo a Ti con el corazón lleno de gratitud y entusiasmo. Al despertar esta mañana, siento una inmensa alegría e ilusión por este nuevo día que me has regalado. Gracias, Señor, por la noche que ya pasó y por todas las maravillosas bendiciones que has puesto en mi camino.
Señor mío, entiendo que no todo lo que sucede en mi vida es fácil o conveniente, pero confío en que todo forma parte de tu plan mayor. Hoy, que sufrí este accidente que me tendrá 6 semanas de reposo, te pido que me ayudes a aceptarlo y entenderlo, me purifiques, me ayudes a confiar más en Ti y a crecer en tu amor.
En esta oración, quiero poner en tus manos mi vida, la vida de mi familia y cada uno de los esfuerzos que hagamos en esta jornada. Por favor, mira nuestros anhelos, nuestras motivaciones y nuestras necesidades. Danos sabiduría, tu amor y tu constante compañía. Ayúdanos a alcanzar nuestros propósitos, ilumina nuestra senda y llévanos por el mejor de los caminos. Te pido que nos cubras con tu poderoso manto y nos mantengas a salvo del peligro, de las injusticias y de la tristeza!
Hoy, al enfrentar esta etapa de reposo debido al accidente que tuve, reconozco la lección invaluable que me estás dando. Valoro profundamente la vida que me has otorgado y la capacidad de moverme, caminar, hacer ejercicio y ser independiente con el uso de mi cuerpo, mis piernas y mis brazos. En estas seis semanas de reposo, aprecio más que nunca la importancia del movimiento y la independencia.
Gracias, Dios, por este tiempo de espera en casa, que me permitirá trabajar en proyectos que había pospuesto y dedicarme a escribir y colaborar con mi socio, amigos y colaboradores. Este momento es maravilloso, pues me brinda la oportunidad de valorar lo que tengo, estar con mi familia y concretar esos proyectos importantes que había dejado de lado. Me siento bendecido por poder dedicarme a estas tareas con total concentración y pasión.
Gracias, Dios, porque mi amada hija Betty, en Australia, está iniciando nuevos proyectos llenos de ilusión y esperanza, y porque aquí en México, mi querido hijo Francisco Javier, está concluyendo sus propios proyectos con un futuro brillante y prometedor.
Gracias por Carlos Alberto, quien se consolida en su negocio y continúa su formación con dedicación y esfuerzo, y por Jorge Alberto, que trabaja incansablemente y está en la etapa de consolidar todos sus aprendizajes, enfocándose con pasión en el proyecto de IMELE, se firmemente que pronto él tomará el rol de liderazgo y será una figura clave en nuestra misión. Agradezco también por Arturo Alberto, quien sigue creciendo y aprendiendo en su empleo, en una empresa líder en su ramo y quien ya está impartiendo clases en dos universidades con orgullo y disfrutando de su hermosa familia.
Gracias por mis nietos, quienes tienen la oportunidad de vivir felices y prepararse para un futuro mejor, rodeados de amor y apoyo incondicional. Verlos crecer y desarrollarse es una de las mayores alegrías de mi vida.
Te agradezco, Dios, por Nuestro México, por la paz durante esta transición política y las elecciones. Pese a las diferencias de opiniones y las diversas ideas, hemos logrado mantener la paz y evitar enfrentamientos entre hermanos. Gracias, Señor, por permitirnos avanzar con respeto y armonía en nuestra querida nación.
Finalmente, te pido, amado Dios, que mi vida, la vida de mi familia y de aquellos que amo esté siempre bajo tu cuidado. Por favor, concede sabiduría y fortaleza para superar las dificultades y ayúdame a sentir tu presencia en todo momento.
Que en este tiempo de reposo, pueda apreciar cada instante con mis seres queridos, valorando sus visitas, sus conversaciones y sus gestos de amor. Gracias, Señor, por estos momentos de conexión profunda.
Te venero y te agradezco, Dios mío, con todo mi corazón.
Amén.