La reforma laboral enciende los ánimos en la Cámara de Diputados. Legisladores de izquierda toman la tribuna en medio de gritos de rechazo a la discusión después de que inició la sesión para discutir y someter a votación el dictamen laboral.
Los diputados de izquierda, ataviados con playeras blancas y mantas en mano, subieron hasta la parte alta de la Mesa Directiva y se postraron alrededor de la tribuna desde donde lanzaron consignas por lo que consideran es una reforma que afecta a la clase trabajadora.
Ante eso, las bancadas del Partido Revolucionario Institucional y Acción Nacional se unieron a los gritos de rechazo por las acciones de protesta que protagonizan los legisladores de izquierda.
No obstante, el presidente de la Cámara de Diputados, el priista Jesús Murillo Karam, continuó con la sesión y dio paso al posicionamiento de grupos parlamentarios en torno al dictamen.
El Partido de la Revolución Democrática propuso una moción suspensiva para detener de manera inmediata la discusión del dictamen de reforma laboral que presentó la Comisión del Trabajo.
Los partidos siguieron en los posicionamientos, lo que motivó a que algunas mujeres diputadas del PRD rodearan al presidente de la Mesa Directiva, en tanto que la legisladora perredista Lourdes Anaya Reyes decidió jalar los cables del micrófono para desconectar el audio de Murillo Karam.
Ello propició que los ánimos subieran de tono y los gritos de la izquierda se confundieran con los de los priistas y panistas, así como de los integrantes del Partido Verde Ecologista de México quienes reclamaban "no a la violencia".
Ante el desorden, Murillo Karam decretó un receso, pero los legisladores de izquierda mantienen la toma, tanto de la Mesa Directiva como de la tribuna y colocaron unas cuantas curules en forma de barricadas en la parte lateral del plano a fin de evitar el desalojo por parte de otros diputados.
Cuando inició la discusión en lo particular de las más de 270 reservas de artículos, los legisladores de izquierda que habían tomado la tribuna anunciaron que la dejarían libre.
Minutos después, los integrantes de la Mesa Directiva, que preside Jesús Murillo Karam, abandonaron el balcón desde donde dirigían el debate y regresaron a sus sitios en el recinto de San Lázaro.