Amigos y amigas, hoy quiero compartir esta reflexión que me envìa una colega que trabaja con Codependientes Emocionales…me pareció muy interesante.
Mi propiedad y tu propiedad
Una herramienta ùtil en nuestra educaciòn emocional, especialmente en la conducta que llamamaos desapego, es aprender a identificar quiène s propietario de què. Luego dejamos que cada persona posea la propiedad que legitimamente le corresponde. Si otra persona tiene una adicciòn, un problema, un sentimiento, o una conducta contraproducente, esa es su propiedad, no la nuestra. Si alguien es un màrtir, està inmerso en la negatividad, es un controlador o manipulador, ésa es su propiedad, no la nuestra. Si alguien ha actuado de cierta manera y ha experimentado una consecuencia particular, tanto la conducta como la consecuencia le pertenecen a esa persona. Si alguien está en negación o no puede pensar claramente acerca de un asunto en particular, esa confusión le pertenece a él o a ella. Si alghuien tiene una capacidad limitada par aamar y ser solìcito, o está impedido para ello, ésa es su propiedad, no la nuestra. Si alguien no tiene aprobación o cariño para dar, eso es propiedad de esa persona.
Las mentiras de la gente, sus engaños, trucos, manipulaciones, conductas abusivas, conductas inadecuadas y conductas tramposas, le pertenecen a ella tambièn, no a nosotros.
Las esperanzas y los sueños de la gente son propiedad suya. Sus sentimientos de culpa le pertenecen tambièn. Su felicidad o su desdicha es tambièn suya. Y lo mismo para sus creencias y mensajes.
Si alguna de estas personas no se gustan a sì mismas, és es su elección. Las elecciones de los demás son de su propiedad, no de la nuestra. Lo que la gente opta por decir y hacer es asunto suyo.
¿Qué es propiedad nuestra? Nuestra propiedad incluye nuestras conductas, problemas, sentimientos, felicidad, desdicha, alternativas y mensajes; nuestra capacidad para amar, para ser solícitos y cariñosos; nuestros pensamientos, nuestra negación, nuestras epseranzas y nuestros sueños. Si pèrmitimos que nos controlen, nos manipulen, nos engañen o nos maltraten, eso es asunto nuestro.
En educación emocional aprendemos a tener un sentido adecuado de la propiedad. Si algo no es nuestro, no lo tomamos. Si lo tomamos, aprendemos a devolverlo. Dejemos que los demàs tengan sus propiedades y aprendamos a poseer y a cuidar bien de las nuestras.
Hoy trabajarè por desarrollar un sentido claro de lo que me pertenece y de lo que no. Si es mío, me quedarè con él. Yo lidiaré conmigo mismo, con mis asuntos y mis responsabilidades. Quitaré las manos de lo que no es mío.
