
Con profunda tristeza, informamos el fallecimiento de nuestro querido amigo y colega, Óscar Ponzanelli, quien ayer, jueves 5 de septiembre, dejó este mundo para entrar en la inmortalidad. Conocido como “El escultor de las estrellas”, Óscar fue un hombre cuyo talento esculpió el alma de México a través de su obra monumental.
A los 58 años, Ponzanelli falleció a causa de un paro cardíaco fulminante en su hogar, en la Ciudad de México. Según confirmó su amiga cercana, Silvia Urquidi, la familia del escultor lo encontró sin vida alrededor del mediodía. Urquidi agregó que, de acuerdo con sus familiares, Ponzanelli no sufrió, pues su rostro mostraba una expresión de tranquilidad.
Ponzanelli deja un legado cultural invaluable que trasciende el tiempo. Fue miembro del Consejo Directivo de la Fundación Amantes de México y del Instituto Mexicano de Líderes de Excelencia (IMELE), entidad que le otorgó el título de Doctor Honoris Causa en reconocimiento a su trayectoria y contribución al arte y cultura mexicanos.
Entre sus obras más representativas se encuentran los bustos de íconos como Juan Gabriel, Armando Manzanero y José Alfredo Jiménez, los cuales adornan el Paseo de los Compositores en Chapultepec, y la Rotonda de los Hombres Ilustres en Chilpancingo, Guerrero, un espacio que honra a figuras clave de la historia del estado. Sus creaciones no solo retratan la figura de estos personajes, sino también su espíritu, logrando captar la esencia de la historia y cultura de México.

Otra de sus piezas más emblemáticas es el Premio Amantes de México, una conmovedora escultura que simboliza el orgullo nacional con la figura de un niño indígena cargando la República Mexicana.
Hasta el momento, no se ha informado sobre los detalles de los servicios funerarios, ya que la familia se encuentra en proceso de trámites.
Óscar Ponzanelli será recordado no solo por su maestría en el arte de la escultura, sino también por su compromiso con su país y su gente, inmortalizando en cada una de sus obras el legado cultural de México.
Esta nota busca honrar el impacto cultural y artístico de Óscar Ponzanelli, quien vivirá para siempre a través de sus creaciones.