Chiquinquirá, Col., 2 Sep (Notimex).- El lienzo de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, la patrona de los católicos colombianos, inició este viernes la peregrinación para su encuentro con el Papa Francisco, quien llegará a Colombia el próximo miércoles en una visita pastoral de cuatro días.
Esta será la décima salida de la imagen de la Virgen de Chiquinquirá, en los 455 años que tiene el lienzo y que está bajo la custodia de los frailes dominicos en la Basílica de Nuestra Señora del Rosario en la plaza central de esta población del central departamento de Boyacá.
En esta ocasión, la patrona y reina de todas las Vírgenes de Colombia, inició su décima peregrinación por solicitud del propio Papa Francisco, quien le rendirá tributo el próximo jueves en la Catedral Primada en Bogotá.
El 3 de julio de 1986, el Papa Juan Pablo II visitó este santuario y oró por la paz de Colombia a los pies de la Virgen de Chiquinquirá, y sus oraciones fueron para que cesara la guerra que dejaba miles de víctimas en el campo y ciudades de este país andino.
El segundo encuentro de la Virgen de Chiquinquirá con el nuevo líder de la Iglesia Católica se hace en un escenario diferente, porque Francisco llega en el momento que la principal guerrilla de Colombia y el continente, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), dejó las armas y le dijo adiós a la guerra.
La salida del lienzo del Santuario Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, se inició a las 03:00 horas locales de este viernes, cuando las puertas de la basílica se abrieron para dar inicio a una ceremonia religiosa entre alabanzas y cánticos a la Patrona para que ayude a Colombia a consolidar la paz.
La despedida que la comunidad de Chiquinquirá le hizo a la imagen fue masiva y apoteósica desde que salió de la Basílica y recorrió las principales calles de la población para dirigirse a Bogotá, fuertemente custodiada por los organismos de seguridad y los frailes, encabezados por el prior de la Basílica, padre Nelson Novoa Jiménez.
La policía, los organismos de socorro, los estudiantes de los diferentes colegios y las principales autoridades de la municipalidad de Chiquinquirá, le hicieron valla de honor a su patrona, con el deseo que regrese al santuario mariano, donde es venerada por nacionales y extranjeros.
El sacerdote Nelson Novoa explicó que cada siete años la Virgen sale de la basílica y recorre en procesión las calles de Chiquinquirá y -solo en casos muy especiales- hace una peregrinación fuera del pueblo.
“La peregrinación de la virgen hacia Bogotá, es una alegría y a la vez una gran responsabilidad para garantizar la seguridad del lienzo y su regreso al santuario”, sostuvo el sacerdote Novoa en entrevista con Notimex.
Indicó que además del encuentro con el Papa Francisco, la peregrinación hacia Bogotá, es para que el “pueblo colombiano visite la virgen, visite a su reina”.
El Papa Francisco, dijo, viene con un mensaje claro de “animar la fe del pueblo porque Colombia ha progresado en la paz, pero aún sigue siendo azotado por muchas situaciones: por la corrupción, la injusticia y el desempleo”.
En Colombia ahora “no nos matamos en las selvas, pero nos seguimos matando de otras maneras, porque la violencia se enquistó en el corazón de los colombianos. Hay violencia en las casas, contra los niños, la agresividad está en aumento y hemos perdido la solidaridad”, añadió.
Apuntó que el pontífice “viene para decirnos que hay un Dios que nos ama, un Dios que no quiere injusticia, que nos da ánimo y nos dé un jalón de orejas (…) Trae un mensaje muy claro: si no hay paz y justicia, no hay futuro posible”.
“No se puede construir una nación tejiendo odios y venganzas. Mientras el corazón humano no se desmovilice, no va pasar nada, no hay futuro”, puntualizó el sacerdote.
