México, 27 Jun. (Notimex).- El ex boxeador mexicano Francisco Cabañas pasó a la historia de los Juegos Olímpicos al ser el primero en conseguir una medalla para el país, y lo hizo en Los Ángeles 1932 al proclamarse subcampeón de peso mosca.
Sin duda, fue uno de los momentos más bonitos para México, pues debió esperar 32 años (desde los Juegos Olímpicos de París 1900, cuando fue la primera participación del país en la justa veraniega), para ver a uno de sus atletas en el podio olímpico.
Aunque cabe destacar que la delegación nacional no participó de 1904 a 1920, y fue hasta París 1924 que lo hizo de manera formal y representada por un Comité Olímpico que, lamentablemente, no obtuvo buenos resultados.
Por otra parte, la participación de deportistas mexicanos en 1900 fue pero con integrantes del equipo de polo denominado Norteamérica, integrado por Manuel Escandón Barrón, Pablo Escandón Barrón, Eustaquio Escandón Barrón y William Hyden Wright, quienes ganaron bronce.
Entonces, fue hasta su tercera aventura olímpica, Los Ángeles 1932 que México tuvo algo para celebrar.
Cabañas Pardo, nacido el 22 de enero de 1912, pugilista de peso mosca, fue la revelación de México en suelo estadunidense al alcanzar la gran final de su modalidad y asegurarse así el tan ansiado trofeo, el cual debió haber sido de color dorado.
Lo anterior, lo consiguió tras vencer en las rondas eliminatorias al italiano Paolo Bruzzi, el australiano Isaac Duke y al inglés Stanley Pardoe.
El peleador nacional inauguró el palmarés un 12 de agosto, fecha en la que superó la antesala, aunque hasta esos momentos se desconocía el color de la medalla.
Al final, Cabañas perdió ante el húngaro István Énekes en el legendario cuadrilátero del Olympic Auditórium californiano, como ya se está haciendo costumbre, esta batalla acabó con bastante polémica, pues en el tercer asalto ambos cayeron y el réferi comenzó a contarle al mexicano, sonó la campana y declaró vencedor al húngaro.
Pese al "robo descarado", como lo calificó el Comité Olímpico Mexicano (COM), la medalla de plata fue, sin duda, un gran resultado, aún cuando el púgil de 20 años viajó a Los Ángeles con su propio dinero, debido al poco apoyo que dio el general Tirso Hernández,
presidente del organismo, a esta disciplina. El atletismo también recibía poco apoyo.
Por ello, el entonces campeón nacional optó por pagarse su traslado y hospedaje. Para ser incluido en la delegación Tricolor, Cabañas debió reunir cerca de 500 pesos (de ese entonces).
El boxeador Jesús Nájera le ayudó con 120 pesos, dinero que arrojó el público en lo que fue su debut como profesional y, su madre le otorgó 300 pesos, todo fue entregado al titular del COM y de esta manera quedó inscrito para los Juegos Olímpicos.
Días después de la hazaña, el propio Cabañas, quien falleció el 26 de enero de 2002, narró a "The Ring" su gran pelea, en la que confesó que seguía sorprendido del resultado, puesto que dominó en los dos primeros rounds. El artículo se tituló "El Robo a Cabañitas".
"En el primer round, el húngaro ataca, lo esquivo y repelo el ataque con cruzado de izquierda que lo estremece. Siento que gano el episodio. En el segundo asalto me tira varios ganchos, pero vuelvo a la carga, le doy una golpiza, pero se sujeta de las cuerdas. Siento que gané el episodio y la pelea", argumentó.
Continuó: "En el tercero, en una de sus alocadas entradas me pisa y ambos caemos. El réferi cuenta, pero a mí, la campana suena y Énekes, cabizbajo va a su esquina. En la arena se escucha el grito de ¡México! ¡México!, pero de pronto quedé helado cuando el réferi levantó el brazo al húngaro, mientras el público dedicaba tremenda rechifla al jurado".
De esta manera, México ingresó al medallero del COI (Comité Olímpico Internacional). En la actualidad se contabilizan 55 trofeos para el país, brindados por 76 atletas (debido a las competencias por equipo), de las cuales 12 son preseas áureas, 19 de plata y 24 de bronce.
















