Este lunes 7 de marzo se hizo pública la lista oficial con 12 candidatos que optarán a la jefatura del Estado. Cada uno de ellos logró reunir 500 firmas de alcaldes y otros cargos electos antes del 4 de marzo, requisito indispensable para poder presentarse a la contienda. Si ninguno de ellos logra la mayoría absoluta en la primera vuelta, programada para el 10 de abril, los dos más votados se enfrentarán en una segunda ronda el 24 de ese mismo mes.
El Consejo Constitucional francés anunció este 7 de marzo la lista oficial de candidatos a las elecciones presidenciales, con 12 contendientes. Son cuatro mujeres y ocho hombres que lograron reunir 500 firmas de cargos locales, cinco de ellos se presentan por tercera vez. En 2017, 11 candidatos disputaron la elección, diez lo hicieron en 2012, 12 en 2007 y 16 en 2002.
Una campaña que se prevé se disputará entre la derecha y la extrema derecha, con un debate marcado por la actual guerra en Ucrania, la reactivación económica tras la pandemia de coronavirus y las políticas migratorias. La izquierda, con propuestas para mejorar los derechos laborales, reducir la edad de jubilación y la transición energética, entre otros, se ve dividida entre varios contendientes.
A continuación el perfil de los candidatos a encabezar la Presidencia francesa durante los próximos cinco años:
El actual presidente, Emmanuel Macron, se presenta para un segundo mandato. Es el gran favorito de esta elección, según los sondeos actuales. Propone trabajar más y seguir bajando los impuestos sobre el trabajo y la producción. Promete que buscará convertir a Francia en el primer país en salir de la dependencia del gas, el petróleo y el carbón, pero el Estado francés fue declarado culpable de daño ecológico en 2021 por el Tribunal de París, por su inacción climática. Durante su mandato, el actual presidente se enfrentó al movimiento de los Chalecos amarillos, la crisis con Mali, la pandemia de coronavirus y el conflicto ruso-ucraniano, entre otros desafíos.
Valérie Pécresse, candidata de derecha del partido Los Republicanos, es la primera vez que esta formación presenta a una mujer a la elección. La presidenta de la región Île-de-France se muestra como la candidata que beneficiará un mayor poder adquisitivo y la seguridad entre los franceses. Propone aumentar el salario mínimo y restablecer “el orden” en los barrios sensibles.
Marine Le Pen, candidata de ultraderecha del parido Agrupación Nacional, se presenta por tercera vez. En la última elección llegó a la segunda vuelta, pero Macron ganó con un amplio margen. La candidata ya no propone salir de la Unión Europea o abandonar el Euro como moneda, pero todavía tiene propuestas radicales sobre la inmigración. Quiere endurecer las leyes que otorgan la ciudadanía y expulsar sistemáticamente a los inmigrantes ilegales.
Eric Zemmour es un candidato de extrema derecha que ya fue condenado tres veces por discurso de odio, especialmente por calificar de “violadores” y “asesinos” a menores no acompañados que llegan a territorio francés como inmigrantes. Defiende una visión tradicional de la cultura francesa y de la educación. Sus temas centrales son la inmigración, el islam y la seguridad.
Nicolas Dupont-Aignan es otro candidato de extrema derecha que se presenta por tercera vez. Promete medidas para “la libertad”, como el fin del estado de emergencia y del pase de vacunación. Propone un mayor uso de referendos para tomar decisiones nacionales y un aumento de soldados en el Ejercito francés y en las fuerzas policiales. También desea el regreso de los controles de fronteras y el fin del espacio Schengen.
Una izquierda debilitada y dividida
Entre tanto, la izquierda llega debilitada a la elección, con poco respaldo en las encuestas y con siete candidatos independientes, lo que divide las posibilidades de cada uno de poder llegar a la segunda vuelta.
Christiane Taubira, quien había ganado la Primaria Popular -un proceso de nominación independiente entre candidatos de izquierda-, será la gran ausente de esta elección, ya que no logró reunir las 500 firmas necesarias para poder presentarse.
Philippe Poutou fue la sorpresa de este anuncio, ya que solo contaba con 439 firmas el jueves pasado, a un día del límite para recogerlas. Finalmente logró reunir los 500 apoyos y participa a la carrera presidencial por tercera vez. Este candidato de extrema izquierda, obrero y sindicalista, se opone al sistema capitalista. Unas de sus propuestas son la semana de trabajo de 32 horas sobre 4 días y el restablecimiento de la jubilación con 60 años.
Jean-Luc Mélenchon, del partido Francia Insumisa, desea instaurar una sexta República, un proyecto centrado en la justicia social y ecológica. También propone un aumento del salario mínimo y la eliminación de la energía nuclear, tal y como la salida de la OTAN y una reforma profunda de la Unión Europea. En los sondeos actuales, está muy por delante de otros candidatos de izquierda. En las dos elecciones precedentes, Jean-Luc Mélenchon terminó en cuarto lugar.
Fabien Roussel, del Partido Comunista, se presenta por primera vez independientemente. En las dos últimas elecciones, el antiguo periodista se había unido a Jean-Luc Mélenchon, pero este año va por su cuenta. Su programa está centrado en la ecología, la reducción del tiempo de trabajo a 32 horas por semana, la jubilación a los 60 años y la licencia de conducir gratuita para los menores de 25 años.
Nathalie Artaud, del partido Lucha Obrera, se lanza a una tercera campaña presidencial. Defiende los intereses de los trabajadores, denuncia la explotación, los bajos salarios y el sistema capitalista. Propone aumentar el salario mínimo a 2.000 euros al mes y hacer posible la jubilación a los 60 años.
Jean Lassalle, diputado, fue pastor e ingeniero antes de entrar en la política. Su programa da mucha importancia a la ruralidad y a la ecología. Propone acordar una renta de solidaridad a los jóvenes de entre 18 y 25 años y contratar 100.000 enfermeras durante su mandato. El candidato es famoso por su huelga de hambre de 39 días en 2006 para salvar una empresa de su región o por hacer un tour de Francia de 5.000 kilómetros caminando para conocer a los franceses en 2013.
Anne Hidalgo, candidata del Partido Socialista. Alcaldesa de París y primera mujer en este puesto, se presenta por primera vez. Su programa se centra en resolver “tres grandes crisis”: la crisis social, la crisis ecológica y la crisis democrática. La candidata quiere aumentar el salario mínimo, limitar las diferencias de remuneraciones y llegar a 100% en las energías renovables.
Yannick Jadot es el candidato ecologista. Este activista fue director de campañas de Greenpeace durante 6 años. Según él, la ecología tiene que ser social. Entre otras medidas, propone acabar con la agricultura intensiva y desarrollar un nuevo modelo agrícola, cerrar diez reactores nucleares para 2035 e instalar 6.000 nuevos aerogeneradores.
