Fuerzas federales y estatales tomaron el control de la seguridad del municipio de Santiago Pinotepa Nacional, Oaxaca, a través de la Operación Sable, toda vez que se encontraron indicios de que la policía municipal tendría relación con la delincuencia organizada.
Bernardo Rodríguez Alamilla, fiscal general de Oaxaca, precisó que ocho personas, dos de ellas a cargo del Centro de Control y Comando del Municipio, C2, contaban con cinco cuentas espejo, “cuando las autoridades municipales únicamente tienen permitido una, la existencia de las demás implica que estaban compartiendo información restringida a personas no autorizadas”.
Asimismo, se arrestó al menos a cuatro policías locales, de los 90 que conforman este cuerpo, por procesos irregulares en portación de armas, así como probable “vínculo con la delincuencia organizada”.
Explicó que esta fase de la Operación Sable participa más 600 elementos de la de Fiscalía en conjunto con la Secretaría de la Marina, Guardia Nacional, Policía Estatal y la Agencia Estatal de Investigaciones, entidades que desempeñarán las tareas de vigilancia, detección de los delitos, así como detenciones, durante el tiempo que sea necesario.
Rodríguez Escamilla apuntó que este operativo es una estrategia de seguridad interinstitucional que busca desarticular redes delictivas, así como lograr la detención de objetivos prioritarios generadores de violencia, y retomar el control de espacios estratégicos en materia de seguridad.
