OTRA VISIÓN
Por Dr. Jorge Fernández
Queridos lectores:
Hoy, me encuentro reflexionando sobre la evolución del papel de la mujer en la historia y su impacto en nuestro presente.
Recordemos que un día como hoy, pero en 1431, se inició el juicio de Juana de Arco, por los ingleses, un símbolo del limitado rol de la mujer en aquellos tiempos. En esa época, las mujeres luchaban por hacerse escuchar en un mundo dominado por hombres, una lucha que parecía casi imposible.
Sin embargo, miremos ahora, en este vibrante 2024 en México, donde presenciamos un cambio histórico: dos mujeres, Xochitl Gálvez y Claudia Sheinbaum, están listas para iniciar sus campañas a la Presidencia de la República. Ambas han recorrido nuestro país, presentando propuestas y mostrando su compromiso con la creación de un México mejor. Esto no es solo un cambio político; es un rompimiento de esquemas y limitaciones que por años impidieron a las mujeres alcanzar posiciones de gran magnitud.
Claudia Sheinbaum, en particular, parece llevar la delantera, apoyada por su partido y el actual presidente. Su candidatura representa no solo la continuidad de un proyecto político, sino también la posibilidad de que una mujer, por primera vez, dirija los destinos de nuestra nación.
Quisiera que reflexionáramos juntos sobre lo que esto significa. A lo largo de la historia, las mujeres han demostrado su capacidad en todos los ámbitos del desarrollo humano: en la administración, la política, la ciencia, el arte, la religión y la música. La elección de una mujer como presidenta no solo traería nuevas esperanzas para México, sino que también sería un testimonio del progreso en la igualdad de género.
Como ciudadanos, debemos reconocer el significado de este momento. Independientemente de nuestras inclinaciones políticas, la posibilidad de que una mujer gobierne México durante los próximos seis años es un hito en nuestra historia. La historia juzgará el impacto de estos acontecimientos, pero lo cierto es que estamos siendo testigos de un cambio significativo.
Sigamos trabajando y luchando por México, porque es el país que dejaremos a nuestros hijos. La historia de Juana de Arco y el presente de Gálvez y Sheinbaum nos muestran que, a pesar de los obstáculos, el progreso es posible y la igualdad de género es un horizonte cada vez más cercano.
MÉXICO VIVE!!!
VIVA MÉXICO!!!