Te pedimos con todo el corazón: Un Llamado a la Unidad y Esperanza

ORACIÓN POR MÉXICO

Por Jorge Fernández H.
Hoy Martes 28 de Febrero

Señor, hoy elevamos nuestra voz con fervor y esperanza, con el alma encendida por el amor a nuestra tierra, por este México que nos vio nacer y que llevamos en la sangre.
Te pedimos con todo el corazón por este país que es cuna de historia, de cultura, de lucha y de sueños. México es un regalo que nos has dado, una nación que vibra con la fuerza de su gente, con la pasión de sus raíces, con la riqueza de su tierra y la grandeza de su espíritu.
Gracias, Señor, por este suelo bendito, por su diversidad, por sus mares y montañas, por sus selvas y desiertos, por sus campos fértiles que alimentan a su pueblo y por la calidez de su gente, que nunca deja de sonreír ni de luchar.

Pero también, Señor, venimos a pedirte con humildad y con urgencia. Sabemos que en México hay dolor, que hay quienes buscan aprovecharse de su riqueza sin pensar en el prójimo, que hay corrupción, violencia y egoísmo.
Sabemos que hay quienes, en su ambición desmedida, olvidan que esta tierra es sagrada, que esta patria es un hogar para todos y no un botín para unos cuantos. Señor, toca sus corazones, abre sus ojos, despierta su conciencia.
Ilumina a quienes han tomado el camino del mal para que encuentren una nueva senda, una senda de bien, de honestidad, de trabajo digno, de justicia. México no merece ser herido por aquellos que lo han olvidado.
México no debe ser lastimado por la codicia ni el abuso.

Señor, te pedimos por los líderes de nuestra nación. Tú que todo lo ves, todo lo sabes y todo lo puedes, pon tu mano sobre quienes hoy tienen en sus manos el destino de nuestro país.En especial, te pedimos por nuestra presidenta, Claudia Sheinbaum. Guíala, protégela de las sombras que acechan, rodéala de personas honestas y justas, líbrala de quienes buscan manipularla o desviarla del bien común.

Dale sabiduría para tomar las mejores decisiones, fuerza para resistir la adversidad y valentía para luchar por un México más justo, más próspero y más digno para todos.

Que cada hombre y cada mujer que ocupe un cargo de poder en México entienda que su labor no es un privilegio, sino una responsabilidad.

Que gobiernen con el corazón en la mano, con la mirada puesta en el bienestar de todos, con el compromiso firme de hacer de México un país donde la justicia sea una realidad y no solo una promesa.

Que los políticos, empresarios y líderes sociales comprendan que la verdadera riqueza no está en lo que se acumula, sino en lo que se construye para el bien común.

Señor, te pedimos también por las naciones que rodean a México, por los países con los que compartimos historia, comercio y diplomacia. Que en cada tratado, en cada acuerdo, en cada negociación, impere la justicia y el respeto mutuo. Que no haya abuso ni desigualdad, que la cooperación sea siempre un camino de beneficio para todos.

Que México sea visto en el mundo como lo que es: una nación noble, trabajadora, generosa, con un pueblo fuerte y digno.

Y finalmente, Señor, te pedimos por cada mexicano y mexicana, por cada niño que sueña con un futuro mejor, por cada madre y padre que se esfuerzan día a día, por cada anciano que guarda la memoria de nuestra historia, por cada trabajador que con sus manos construye el país. Que nunca nos falte la esperanza, que nunca se apague en nosotros el orgullo de ser mexicanos. Que la paz, la armonía y la seguridad sean realidades palpables en cada rincón de nuestra tierra.

México es grande, Señor. México es fuerte. México es hermoso. Y hoy te pedimos con todo el amor y la fe que tenemos en el alma: sigue bendiciendo esta nación, sigue guiando a su gente, sigue protegiendo su destino. Porque México no es solo un lugar en el mapa, es nuestro hogar, nuestro corazón, nuestra identidad.

Amén.